Envuelto en la insania
de tus recuerdos
me recordé a mi mismo
que no te amaba
pero, demonios,
como te necesitaba
a mi lado.
viernes, 27 de diciembre de 2013
miércoles, 25 de diciembre de 2013
sábado, 21 de diciembre de 2013
Ese tipo de cabrón
Al parecer yo soy ese cabrón. El que no escucha, que no llama.
Yo soy el cabrón que no pregunta cómo estás o qué tal tu día. Yo soy así, un perro más, otro boludo más.
Soy el cojudo que no te busca, al que le interesas una mierda.
Soy el cabrón que no piensa en ti en ningún momento del día, al que le vale mierda cómo estés.
Soy el imbécil, el maldito, el perro que no se movería al otro lado de ciudad por verte un rato.
Al parecer, soy ese tipo de cabrón. Un desconsiderado, un distraído. Uno que no te quiere.
Yo soy el cabrón que no pregunta cómo estás o qué tal tu día. Yo soy así, un perro más, otro boludo más.
Soy el cojudo que no te busca, al que le interesas una mierda.
Soy el cabrón que no piensa en ti en ningún momento del día, al que le vale mierda cómo estés.
Soy el imbécil, el maldito, el perro que no se movería al otro lado de ciudad por verte un rato.
Al parecer, soy ese tipo de cabrón. Un desconsiderado, un distraído. Uno que no te quiere.
jueves, 19 de diciembre de 2013
Exception
Con la incipiente luz que se traslucía tras la ventana, el canto de los pájaros le recordaban a Sebastián que la mañana ya se acercaba, una mañana que dejarían en recuerdo la fiesta de la noche anterior. Sentado, calmado mirando al pasadiso, escucha el tarareo jocoso de Manuel
- Con esta los mato
De pronto, el rasgueo de la guitarra comienza a inmiscuirse en su mente. No le había parecido una mala canción pero nunca la habia asociado a alguien. Sin embargo, con lo que estaba pasando por su mente esos días no pudo evitar evocar un solo rostro mientras comenzaba la letra.
Clavo la mirada perdida en el vacío rememorando momentos de risas e incomodidad. Viendo su celular, comenzó a leer cada mensaje que se habían mandado, se acordaba de cada día.
Well you are the only exception ♪
Susurrando lentamente cada línea no pudo evitar que se le nublara la vista. De pronto, ese pequeño temblor invadía su rostro, aparecía ese nudo en la garganta. Volteó la mirada a la ventana otra vez, pero esta para que no se viera la lágrima que surcaba lentamente por su mejilla.
lunes, 16 de diciembre de 2013
sábado, 7 de diciembre de 2013
Montañas rusas
Hay aspiraciones que no se llegan a cumplir, o bueno, creemos que no se están cumpliendo en el tiempo que esperábamos.
Unos años atrás, me preguntaba cómo sería estar en una relación formal. A esa edad dificil que alguien se tome verdaderamente en serio tal pregunta viniendo de un mocoso de 14 años. También sabia que tenia miedo a eso, mucho miedo, por el temor a abrirme a una persona, que pueda ver cosas que solo yo veía o incluso que vea más allá de lo que mi propio entendimiento podía crear en mí.
En aquella primera relación la buscaría, la esperaría, disfrutaría cada segundo que compartiria con ella o él (felizmente desde pequeño pude reconocer que no hay diferencia, por motivos del post escribiré "ella" solamente). Con los años fui apreciando mucho más lo que es el espacio personal, algo que valoro mucho, por lo que, en esa primera relación también tendría que haber esos espacios, estar mucho tiempo con alguien, por mucho que la quieras, terminarás minando tu relación (cualquier tipo de relación con esa persona). Que ella fuera libre de hacer sus cosas así como yo las mías. Siempre me parecía tan risible cuando venian, tanto amigos como amigas, a decirme que sus respectivas parejas les habían prohibido hablar con alguien, o les habian recriminado que dejara de hacer lo que más les gustaba hacer por pasar tiempo con el/ella. No entraba en mi cabeza en que mundo una persona que no seas tú, te podía privar de hacer algo o hablar con alguien.
Pensaba que nada de esto me pasaría porque yo iba a ser, si bien no perfecto, bastante bueno, que estaría cuando necesitaba estar, que le daría su tiempo cuando así fuese necesario, pero, como en todo en nuestra vida, cuando más grandes son las aspiraciones y fallas, es cuando más duele y más decepciona a uno mismo.
Había llegado a un punto en mi vida en el que sentía que todo estaba bien, después de muchisimo tiempo, que cada aspecto de mi vida resultaba, en su mayor parte, como quería, que el karma, fuerza universal, Dios o el destino había decidido tomarse un break conmigo y dejarme disfrutar de las cosas que importaban. Sin embargo, esta vida es un ciclo, y así como tiene picos buenos, también llega la parte donde empezamos a sentir el descenso, como en una montaña rusa, donde llega un punto en el que ya puedes precisar que se acerca lo turbulento, una vez más.
Hoy no ha sido un buen día.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)